Dentro de los diferentes sistemas que se usan para ensamble de productos, los AGVs ganan fuerte terreno día con día, debido al gran avance tecnológico que incorporan. A continuación te presentamos algunos factores que explican el por qué de esta realidad.
Un sistema construido con vehículos guiados automáticamente, permite desarrollar diversos layouts con un costo mínimo. En realidad, se puede realizar cualquier configuración, o bien, a partir de un arreglo ya hecho puede obtenerse uno modificado con mínimos costos adicionales. Esto proporciona una gran ventaja para adecuarse a requerimientos, tanto internos, como del mercado externo.
Si se cambian los dispositivos apropiados, cada vehículo puede adaptarse a nuevos modelos de producto que demande el mercado. Todo esto sin la necesidad de modificar rígidos y costosos equipos convencionales.
Conforme las operaciones realizadas, cada producto en determinada estación de trabajo puede tardar más, o menos tiempo, según requiera el proceso. Aún cuando esto no elimina la necesidad del balanceo, provee un natural mecanismo de adaptación a los diferentes ritmos de las diversas operaciones que se ejecutan en las estaciones. Como resultado, tendremos más calidad y productividad.
Es ideal manejar dentro de un mismo sistema de ensamble el resurtido de los diferentes componentes que cada estación necesite, aunque se impliquen más vehículos. Sin embargo, esta decisión resultará más económica que otros métodos convencionales, además de que aporta mucha versatilidad a la operación.
Existen vehículos para ensambles ligeros, como por ejemplo un iPad. También los hay para ensamblar grandes tractores, vehículos o partes aeroespaciales. Los podemos encontrar desde tracciones tan pequeñas como 200 KG, hasta de 6000 KG o más, todos en una amplia gama de arreglos, tamaños y pesos.
Otra de las características que les brindan versatilidad, es la capacidad de combinar aditamentos automáticos para interconectarse con las partes de su proceso. Los vehículos pueden incluir aditamentos adecuados para interactuar con las máquinas que el proceso requiera, brindando la posibilidad de hacer transferencias automáticas entre el sistema de ensamble y las demás operaciones del proceso.
Todo el sistema puede ser monitoreado a través de un paquete propietario que le permite conocer y administrar los diferentes vehículos dentro del mismo, así como su recorrido por las diferentes estaciones de trabajo y las variables básicas de interés para la operación.
Estos sistemas están ideados para que el cliente mantenga un liderazgo en tecnología, productividad y competitividad. Son diseñados a la medida de las fuertes exigencias del mercado.
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